jueves, 2 de enero de 2014

LLanto en los niños.



EL LLANTO EN LOS NIÑOS

El hecho de llorar y tener rabietas no es un capricho ni una manipulación sino el reflejo genuino de una necesidad y por tanto no se debe considerar jamás una mala conducta.

Lo mejor para los niños es que no se les ignore cuando lloran. Siempre han de encontrar una respuesta cariñosa. Sin embargo no todos los llantos son indicativos de una necesidad o deseo inmediatos....Ver más

EL LLANTO EN LOS NIÑOS

El hecho de llorar y tener rabietas no es un capricho ni una manipulación sino el reflejo genuino de una necesidad y por tanto no se debe considerar jamás una mala conducta.

 Lo mejor para los niños es que no se les ignore cuando lloran. Siempre han de encontrar una respuesta cariñosa.  Sin embargo no todos los llantos son indicativos de una necesidad o deseo inmediatos.

 El llanto es a menudo un mecanismo de liberación del estrés que permite a los niños descargarse de los efectos de experiencias que les han causado daño, miedo, estrés o frustración.

 Los niños  utilizan el llanto y las rabietas para solucionar tensiones. Por tanto, el educador no debe intentar suprimir este comportamiento ya que son necesidades básicas tan importante como el alimento.

 Estrés en los niños:

-      Físico : Hay un daño inmediato en el cuerpo (brazo roto, mordisco, hambre…)

-      Psicológico. Que hacen que el niño se sienta frustrado, ansioso, aterrorizado, confundido, traicionado, triste, decepcionado.

QUE HACER CUANDO EL NIÑO LLORA.

1.- No dejar nunca a un niño llorando solo, aunque sean 5 minutos, eso les impide desarrollar un sentido de confianza básica en la vida, se sienten abandonados y aterrorizados.

2.- Asegurarnos de que otras necesidades ya están satisfechas (hambre, frío, contacto…)

3.-Prestar atención al niño y aceptar su llanto, sosteniéndole en brazos, sin mecerlo ni acunarlo. Permitirle llorar, no pretender cambiarlo.

4. Sí no se deja sostener, frecuente si es una rabieta de un niño mayor de 1 año ir a un sitio seguro y permanecer a su lado. Patadas, se arquea… No permitir que nos agreda.

5.- Importante conectarnos con el amor que sentimos, aceptar cariñosamente su llanto, abrirnos, respirar hondo, ponernos cómodos.

6.- Hablarle “llorar está bien”, “claro” “tuviste un día duro”

7.- Darme cuenta de lo que yo siento, estar cerca de mis sentimientos, así el acompañamiento es profundo y muy sanador. No es fácil, cuestión de práctica. Convencerme de que no pasa nada porque llore.

8.- Mirarle a los ojos. Estoy contigo. No sorprenderse sí aun llora más.

9.-Dejar que termine de llorar de manera espontánea.

No hay comentarios:

Publicar un comentario