viernes, 30 de agosto de 2013

ABACO EN RED: EXITO VS FELICIDAD.

NOS ENSEÑAN A BUSCAR EL EXITO NO LA FELICIDAD.

Todos buscamos, en mayor o menor medida, tener éxito.

Pero…¿qué significa éxito para ti?
¿Y si los has logrado, te ha hecho feliz?
¿Por cuánto tiempo?
Podemos tener mucho éxito y ser infelices.
Podemos ser muy felices, aunque desde el punto de vista de la mayoría de la gente, no seamos exitosos.
El diccionario nos dice que tener éxito, es lograr el resultado que deseamos.
Pero nuestra cultura, la occidental, ha utilizado la palabra éxito, casi como sinónimo de poder y de grandes logros económicos y sociales, es decir, de ser alguien que "vale la pena" en esta vida.
Así, una palabra que se usaba para ver qué tan productivos eran los negocios, se usa actualmente para calificar la calidad de nuestra vida.
Esta forma de ver el éxito provoca algunos problemas importantes:
A partir de este enfoque, sólo le damos importancia a los resultados y dejamos de disfrutar el proceso.
En lugar de centrar nuestra atención y darle importancia a la manera de vivir cada momento del día, a disfrutarlo, a estar conscientes de él, nos centramos únicamente en los resultados que vamos o queremos obtener.

La búsqueda del éxito se vuelve sumamente estresante.

Vivimos haciendo un esfuerzo constante y tratando de alcanzar siempre una nueva meta que representa ese éxito y que de alguna manera creemos, (equivocadamente), demuestra el tipo de personas que somos.
Con frecuencia pagamos un precio sumamente alto en salud, estrés, en el tiempo que sacrificamos de estar con la familia o amigos, etc., por lograr algo que cuando lo alcanzamos, no nos da la felicidad que esperábamos o dicha felicidad dura muy poco tiempo.
¿Y entonces qué?
Tenemos que ponernos una meta mucho más alta y difícil de lograr, para que nos haga sentir, ante los demás o incluso ante nosotros mismos, más importantes, poderosos y capaces económicamente.

Lo utilizamos para demostrar nuestro valor personal.

Este aspecto está relacionado con el tipo de autoestima que tenemos.
Si nuestra autoestima es baja o inflada, nos basamos en logros concretos, generalmente materiales y valorados por los demás, para valorarnos a nosotros mismos.
El problema es que, cuando tenemos esta creencia equivocada, siempre nos vamos a sentir mal, porque:
Por un lado, siempre hay gente que tiene mucho más que nosotros, por lo que nunca sentimos que es suficiente.
Por el otro, lo que para unos es "valioso", para otros no, por lo que vivimos enfocados en tratar de complacer a mucha gente y cumplir con sus parámetros, lo cual es imposible y el costo físico y emocional que pagamos, es enorme.

No tenemos claro lo que significa éxito para nosotros, por lo que tratamos de alcanzar lo que otros han calificado cómo tal.

Esto nos puede llevar, fácilmente, a vivir rodeados de muchas cosas y de muchos logros, pero totalmente insatisfechos y con frecuencia, ni siquiera conocemos la causa de dicha insatisfacción.

Consideramos que éxito, riqueza material y felicidad son lo mismo.
Por lo que, cuando logramos los primeros dos y no el tercer elemento, podemos caer en una carrera interminable por tener más y más, buscando una felicidad que no vamos a encontrar porque no necesariamente van unidos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario